domingo, 27 de enero de 2019

ETIMOLOGÍA DE "AMBICIÓN"

Entre los antiguos romanos, la palabra “ambitio”, derivada del verbo “ambire” 'rodear', 'pretender', se usaba para denominar la actitud de los políticos que circulaban por la ciudad y rodeaban a sus partidarios para no perder su apoyo, buscando con todo empeño escalar nuevos peldaños en la carrera de los honores.

Por esa razón, acabó adquiriendo la denotación de 'lisonja', 'adulación', pero también 'ostentación, 'posición elevada' y 'ansia de poder y riquezas'. 

Las palabras ambición y ambicioso llegaron al idioma español en el siglo XV, derivadas de “ambitio” y “ambitiosus”, respectivamente.

viernes, 18 de enero de 2019

II CONCURSO NACIONAL DE FÍSICOCULTURISMO GRAN CHIMÚ 1987

Justo por hoy día 18 de enero, hace 32 años (1987), con tan solo 23 años de edad, consigo el “3° Puesto Categoría Junior” (20 a 25 años) en el “II Concurso Nacional de Físicoculturismo Gran Chimú 1987”. Fue una competencia realizada aquí en Chepén por la “Liga de Físicoculturismo de Chepén” y presidida, en ese entonces, por el profesor Aldino Enrique Malca Coba, director – propietario de gimnasio “Malka”.

A esta competencia, se dieron cita atletas de casi todo el Perú, tanto hombres como mujeres en diferentes categorías. Después de este título a nivel nacional, logré conseguir varios más en diferentes ciudades del Perú, que los iré colocando aquí cada mes o dos meses.

Fue un gran triunfo para mí el obtener este tercer lugar en mi categoría (Junior) y, sobre todo, a nivel nacional. Grandes satisfacciones que me dio el deporte de los hierros. Y fue precisamente gimnasio “Malka” el gimnasio que me vio nacer como físicoculturista, mudo testigo y celoso guardián de todas mis proezas deportivas que, después de muchísimos años, he decidido publicar las más sobresalientes.

domingo, 13 de enero de 2019

ORIGEN DE "PALESTRA"

A muchos deportistas, en las competencias, los llaman a la PALESTRA, pero ¿saben el significado y origen (etimología) de dicha palabra? Después de tantos años compitiendo ¿se habrán tomado la paciencia de revisar el “Diccionario Panhispánico de Dudas”, el “Diccionario Etimológico” o, por lo menos, el “Diccionario Enciclopédico”? Veamos:

Llegó a nuestra lengua española proveniente del latín “palaestra” y este, del griego “palaístra” 'lugar donde se lucha', derivado del verbo “palaíein” 'luchar'. 

Griegos y latinos llamaban así a los gimnasios o lugares donde se luchaba y, por extensión, también a la propia lucha. A partir de cierta época, los antiguos pasaron a denominar con la misma voz el lugar donde se desarrollaban ejercicios literarios o se debatía algún tema, asociando el concepto con el de lucha intelectual. 

A partir de esta acepción, se formó la expresión “salir a la palestra” o “saltar a la palestra”, que significa 'tomar parte activa en una competencia pública' o, también, 'aparecer públicamente". 

La palabra griega se originó a partir del nombre de Palestra, la hija del rey Pándoco de Arcadia. Esta hermosa joven era amante de Hermes y, al enterarse ella de que su padre se disponía a matarlo, puso al dios al corriente de la maligna intención del rey y le pidió que le diera muerte primero para, de esa manera, salvar la vida. Como homenaje de gratitud a la hermosa joven Palestra, Hermes dio a los gimnasios el nombre PALESTRA. En cambio, en portugués, “palestra” significa 'conferencia, charla'.

domingo, 6 de enero de 2019

¿SABÍAS QUE...?

Muchas hipótesis se han tejido sobre el origen de esta palabra española “ADREDE” que ya estaba en la lengua en los tiempos del diccionario de Sebastián de Covarrubias (1611), quien explicaba su significado como equivalente a 'a sabiendas', según él proveniente del italiano “et dritto” en el sentido de 'directamente'. Covarrubias también considera la posibilidad de una etimología árabe, a partir del verbo “dari”  'saber', de donde “a-drede” significaría 'a sabiendas'. La Real Academia de la Lengua Española duda entre adherirse a la hipótesis del catalán “adret” y la del latín “ad directum”, casi equivalente a la de Covarrubias. 

Sin embargo, Corominas (1980), la mayor autoridad en etimología española del siglo XX, desecha, con un complejo razonamiento filológico, todas esas hipótesis y afirma que no ve otra explicación que un origen gótico, que él identifica en “rhets”  'consejo', que forma parte de una vasta familia de palabras en la biblia gótica "varios de los cuales dejaron copiosa prole romance ('correar', 'arrear', etc.)". Al latín medieval, esta palabra gótica legó “redum”, que en francés dio “roi” 'rei'. 

En alemán antiguo, “at red” significaba 'en consejo' o 'en consulta', lo que habría dado en latín medieval “atrede” y luego, en romance castellano, «adrede». Y en efecto, en el norte de España, donde la colonización germánica fue más densa, como en Asturias, se dice “arredre” 'intencionalmente, a propósito'.