miércoles, 22 de agosto de 2012

LA TILDE DIACRÍTICA EN EL ADVERBIO "SOLO"

La supresión de la tilde en el adverbio solo en la nueva “Ortografía de la lengua española” (2010) ha generado polémica porque muchas personas sostienen que es necesaria para aclarar el significado de una frase, evitando así el riesgo de ambigüedad. Finalmente, son muchos los que no están conformes con la norma y no la aplican, pero lo correcto es escribirlo sin tilde.

En la Ortografía de 1959 la Academia ya suprimía la tilde en este adverbio y decía que podía llevarla para evitar una ambigüedad. Ahora, eliminando esta tilde, la RAE no ha abierto un nuevo proceso, sino que ha dejado claro que se puede prescindir de la tilde incluso cuando se trate de un caso de doble interpretación.

La tilde diacrítica es una excepción dentro de la reglas de acentuación. Esta tilde nos sirve para diferenciar palabras que se escriben igual pero tienen significados distintos, como te (pronombre, con distintos valores) y (sustantivo, infusión). 

La regla de la tilde diacrítica opone la palabra tónica a la átona, es decir que, para poder usarla, una palabra debe ser tónica y otra átona, como ocurre con los ejemplos anteriores: té, tónico (lo pronunciamos elevando el tono), y te, átono (sin relieve en la pronunciación). No decimos *Té aviso de que no iré, sino Te aviso de que no iré.

En el caso de solo, las dos palabras, el adverbio y el adjetivo, son tónicas. Por lo tanto, solo constituye una excepción al oponer dos palabras que son tónicas, o sea, que las dos las pronunciamos con la misma elevación del tono. Igual decimos Solo tengo quince años (adverbio), que  Estoy solo en casa (adjetivo).

Este es el porqué de la eliminación de la tilde en el adverbio solo.
Otro ejemplo sería la forma verbal ve: Ve a comprar pan. / No ve el peligro.
En la primera oración se trata del verbo ir y en la segunda del verbo ver. Las dos son palabras tónicas, por eso no las diferenciamos con tilde diacrítica.
El filólogo costarricense Cristian Fallas Alvarado, colaborador en la nueva Ortografía a través de la comisión de la Academia Costarricense de la Lengua, explica que «los casos de ambigüedad con solo se pueden evitar como cualquier otro de los tantos que pueden presentarse en la lengua. La ambigüedad está relacionada con el contexto, el orden de las palabras o la puntuación, pero no con la tilde, que solo marca la vocal perteneciente a la sílaba tónica de una palabra. Además, hay sinónimos que pueden sustituir a ese adverbio: solamente y únicamente».

Salvador Gutiérrez Ordóñez, académico coordinador de la Ortografía, nos ofrece ejemplos de casos de ambigüedad donde ya no se tildan estas palabras:

Aquello le ocurrió de nuevo. ¿Cuando era nuevo o nuevamente? 
El bombero acudió pronto. ¿Acudió veloz o con tiempo de sobra?
El defensa juega limpio. ¿Juega honradamente o aseado?
Hoy trabaja seguro. ¿Seguro que trabaja hoy o trabaja de forma segura?
Esto es algo aburrido. ¿Es una cosa aburrida o es un poco aburrido?
Claro que lo veo. ¿Está claro que lo veo o lo veo de manera clara?
El rumor cierto rompió la familia. ¿El rumor verdadero o ciertamente?
Compró un piso primero. ¿Lo compró antes o era un primer piso?
Quizá nos cueste adaptarnos a los cambios, y puede pensarse que la Academia quiere fastidiarnos con estos. Sin embargo, la RAE, en el establecimiento de la norma, que no deja de ser un proceso complejo, trata siempre de hacer propuestas coherentes y buscar un equilibrio.

viernes, 17 de agosto de 2012

PENSAMIENTOS DEL MES

AMIGOS:
"Otros perros sólo muerden a sus enemigos, mientras que yo también muerdo a mis amigos con el fin de salvarlos".
-Diógenes de Sínope-

LIBERTAD:
"¿Quién es libre? Sólo el que sabe dominar sus pasiones".
-Quinto Horacio Flaco-

FELICIDAD:
"No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad".
-Gabriel García Márquez-

CASTIGOS:
"El que impone un castigo desproporcionado no corrige, sólo se venga".
-Tayeh Saleb-

CUALIDADES:
"No se debe juzgar a un hombre por sus cualidades, sino por el uso que hace de ellas".
-Francois de la Rochefoucauld-

domingo, 12 de agosto de 2012

LA PALABRA DEL MES

El sustantivo femenino TOALLA se trata de una antigua palabra germánica, que puede haber llegado al idioma castellano a través del portugués toalha o bien del catalán tovalla o, aun, del italiano tovaglia. En castellano antiguo se usó toaja, tobaja y tovaja.

El vocablo original sería el germánico thwahljo 'baño', que aparece también en el gótico twahl 'baño' y en el escandinavo antiguo thvâl 'jabón'.

En el lenguaje deportivo se usa la expresión tirar la toalla o arrojar la toalla para denotar la costumbre de que el cuidador de un boxeador arroje una toalla sobre los púgiles para dar por terminada la pelea cuando su pupilo está en inferioridad de condiciones. Por extensión, ambas expresiones se usan también en el lenguaje general con el sentido de darse por vencido.

martes, 7 de agosto de 2012

¿QUÉ SON LAS CONJUNCIONES "Y / E"?

De vez en cuando me preguntan varias personas sobre unas palabras muy pequeñas y muy usadas que aparentemente no tienen tanta importancia; me refiero a las conjunciones "y", "e". Paso a detallarlas brevemente.

Las conjunciones son una clase de elementos muy sociables que sirven para unir o relacionar palabras u oraciones. Son siempre invariables y átonas (se pronuncian sin acento distintivo). Se llaman conjunciones porque conjuntan, enlazan con armonía oraciones para que no nos queden cojas.

Las conjunciones coordinantes copulativas (cópula significa 'unión') que unen oraciones son y y su variante e, ni.

La conjunción e se utiliza cuando la siguiente palabra empieza por i- o hi-: Laura e Inés;  Malasia e Indonesia; Padre e hijo; Limpieza e higiene.

Pero no debe usarse ante el diptongo hie-: Cobre y hierro; Menta y hierbabuena; Leones y hienas; Mata y hiere.
 
Un error que suelen cometer algunos periodistas es el empleo de la conjunción e cuando la siguiente palabra comienza con el diptongo hie-:
"Un encapuchado mata a doce personas e hiere a casi 60 durante el estreno de una película".
El Diccionario panhispánico de dudas también nos aclara este punto de la conjunción y:

"y" Conjunción copulativa. Toma la forma "e" ante palabras que empiezan por el sonido /i/: Eres único e irrepetible; Necesito aguja e hilo. Existen las siguientes excepciones:
 
a) Cuando al sonido /i/ le sigue una vocal con la que forma diptongo: La mesa es de madera y hierro (no *de madera e hierro).

b) Cuando la conjunción se hace tónica y adquiere un valor adverbial en oraciones interrogativas: ¿Y Inés? [= ¿Dónde está Inés?].

Así mismo, hay palabras como hiato o ion, que pueden articularse con hiato ([i - á - to], [i - ón]) o con diptongo ([yá - to], [yón]). De ahí que sea válido el uso de e (si se articulan con hiato) o de y (si se articulan con diptongo) delante de estas voces: diptongo e hiato o diptongo y hiato; moléculas e iones o moléculas y iones.

No obstante, como a veces la pronunciación de la variante "e" resulta incómoda, siempre que puedan enviten su uso cambiando el orden de las palabras; por ejemplo: coser e hilvanar por hilvanar y coser. Además, hilvanar es antes de coser.

miércoles, 1 de agosto de 2012

¿SABÍAS QUE...?

SUDACA es un derivado irregular de sudamericano (natural de Suramérica o América del Sur) combinado con el sufijo -aco, que tiene un valor despectivo. La voz, efectivamente, se emplea en España en modo despectivo y de forma coloquial para calificar a las personas naturales de América del Sur.

...El término surgió a finales de los años 1970 y principio de los 80 cuando llegaron a España numerosos exiliados políticos procedentes de Argentina, Chile y Uruguay, los cuales contaban con la solidaridad de la sociedad española que promovió eventos como conferencias, exposiciones conciertos, etc. estos acontecimientos crearon una tendencia cultural que se denominó “movida sudaca”, de ahí procede el término, que acabó adquiriendo tintes peyorativos.

En la novela “El olvido que seremos”, del escritor colombiano Héctor Joaquín Abad Faciolince (1958), encontramos un magnífico ejemplo de uso:

“…Entra en un bar, se sienta, y los meseros no lo atienden. Al notar que no vienen, palmotea, como se hace en su tierra. Como no viene nadie, grita, ¡oiga! Pero no lo atienden, entonces se quita los zapatos rotos para que se le vean las medias rotas, apoya los pies sobre la silla del frente, saca un periódico mal doblado del bolsillo del abrigo, y se pone a leer humedeciéndose con la lengua los dedos al pasar las páginas.

Al rato, al fin, un camarero se acerca, con ese aire que tienen los que te van a echar a la calle, pero los ojos del loco lo fulminan. Pide un tinto. Cuando el camarero le trae un vino tinto, el loco dice molesto: “Le pedí un café, ¡pero es que ustedes no entienden! Tráigame un café solo, aguado, americano, como dicen ustedes”. Así muchas veces, me cuenta, hasta que el loco decide que en adelante, con los camareros, hablará solamente en inglés.

Detestan su acento sudaca, sus palabras sudacas, su imprecisión sudaca, sus zapatos sudacas y, sobre todo, su evidente pobreza sudaca. "Waiter, please, a coffea, an american coffea, if you don´t mind". Así le va mejor, lo consideran un turista excéntrico...