SI NO SIRVES PARA DAR BUEN EJEMPLO, TAMPOCO DES MAL EJEMPLO

Este es un artículo de mi autoría publicado en mi Facebook (Nicanor Alfredo Camacho Núñez). Además del presente, tengo varios más.

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Por: Nicanor Alfredo Camacho Núñez

Casi a diario veo a muchísimos deportistas y aficionados hacer un sinnúmero de ejercicios (por citar un ejemplo) para los abdominales que varias veces me asombran porque tratan de inventar, incluso no falta “alguien” que les hace creer que están descubriendo nuevos y mejores ejercicios para los abdominales. En realidad, existe UN SOLO MOVIMIENTO (en su función básica) para el abdomen: “La frente la acercas a las rodillas, o las rodillas las acercas a la frente”. Repito, esa es la ÚNICA FUNCIÓN BÁSICA de los músculos abdominales; jamás va a variar. A menos que Dios cambie el diseño anatómico humano. ¿No te has percatado, acaso?

Olvídate de los “subnormales”, perdón, de muchos entrenadores con un nivel cultural ínfimo que intenten hacerte creer que conocen “otros ejercicios mejores”. Por eso, como Gramático, jamás empleo los adverbios “mejor” ni “peor”, sino diferente (en su función básica es la misma). La cantidad de ejercicios que existen o que “supuestamente inventen o descubran” es en base a la MISMA FUNCIÓN BÁSICA. Son 207 huesos y 275 pares de músculos esqueléticos que tiene ABSOLUTAMENTE TODO ser humano; eso no lo cambia nadie. Si son ejercicios de piernas, todos ellos tienen la misma función básica. Si son para el pecho, de igual modo, todos ellos tienen la misma función básica. Si son para la espalda, lo mismo, todos ellos tienen la misma función básica, etc., etc. Por ello, y para que no se dejen sorprender, siempre les advierto a mis clientes que la GRAN MAYORÍA de “entrenadores de aeróbicos y anaeróbicos” tienen un “nivel intelectual ínfimo y deplorable”. Por si fuera poco, son egoístas, egotistas y egocéntricos, muchísimo más de lo que la Psiquiatría considera el máximo permisible (patología). Por todas estas razones y muchas más, la ciencia los califica como “subnormales” y hasta “anormales”. Por esos motivos, estos diminutos andan con sofismas, enredando las cosas para aparentar que es asunto de gente muy instruida. En cambio yo, constantemente les expongo a mis clientes que TODO en la vida es SIMPLE Y SENCILLO, no fácil; todo es TRABAJO FUERTE en nuestra existencia. Digo simple y sencillo, porque HASTA UN NIÑO LO ENTIENDE cuando se le explica con la didáctica del caso, sin enredos.

Por eso recalco: “Tienes que estar consciente de que todo en la vida implica bastante trabajo; nada cae del cielo”. ¿Quieres ser un gran profesional de éxito?, necesitas hacer, durante muchos años, un trabajo intelectual (estudio) con enorme dedicación y disciplina. Igualmente, el desarrollo de los músculos esqueléticos implica un gran trabajo físico durante años, junto a una alimentación y descanso adecuados; es decir, una vida muy disciplinada. No incluyo aquí los “anabólicos esteroides”, ya que eso los usan los “subnormales” –en el menor de los casos– y los “anormales” –en el peor de los casos– para conseguir imaginaria y fugazmente una migaja de admiración, reconocimiento, etc. Es decir, en la inmensa mayoría de físicoculturistas, mientras más elevado sea el “título deportivo” que ostente, menor nivel cultural y mayor desequilibrio emocional va a tener; todo ello conlleva inexorablemente a una menor dignidad. Esto lo compruebas observándolos con detenimiento su manera de actuar, hablar y hasta de escribir.

Conozco a varios campeones nacionales que, en sus inicios deportivos, han tenido que DENIGRARSE para poder adquirir los benditos “anabólicos esteroides”, por su elevado costo económico. Ya después, los que empiezan a destacar o a los que les ven buena genética, las empresas o laboratorios que venden o producen dichos fármacos se aprovechan de la patología de estos deportistas y les ofrecen, sin costo económico, en la modalidad de patrocinador o auspiciador, a cambio de publicidad. Dije sin costo económico, porque todo en la vida tiene un costo, y nadie se burla de ella. En este caso, la NATURALEZA pasa la facturasa, tarde o temprano, incluido sus elevados intereses. Por ese motivo, en el físicoculturismo actual, el que quiere destacar –ya lo dije en otros artículos– NECESARIAMENTE va a tener que inyectarse los benditos ANABÓLICOS ESTEROIDES, que la “ciencia médica no los recomienda”; es lo que siempre les advierto a mis clientes. Pues, lo más importante que tenemos, después de la vida, es la salud. Por tal razón, veo que es una gran labor esto de inducir a los jóvenes para que NO USEN “los anabolizantes”, porque su tendencia natural es usarlos.

El asesoramiento que siempre he brindado desde hace muchos años es holístico o integral, es decir, contribuyo a mejorar su “hardware” y, sobre todo, su “software”, algo que poquísimos Entrenadores Personales o Personal Trainer están capacitados para realizarlo; la gran mayoría no tienen la catadura moral ni cognoscitiva para hacerlo. Acaso, ¿conocen ellos sobre Filosofía, Sociobiología, Anatomía, Biomecánica, Nutrición, Cronobiología, Epistemología, Programación Neurolingüística, Gramática, etc., etc.? La inmensa mayoría de entrenadores solamente te enseña a alzar los fierros como animalito (anaeróbicos), o a bailotear o brincar sobre los steps como canguro (aeróbicos). Por si fuera poco, casi siempre están pugnando con sus clientes para animarlos a que se inyecten esos anabolizantes y solamente tengan músculos desarrollados (“hardware”), sin tener en cuenta el progreso intelectual, espiritual, psicológico, etc. (“software”). De modo que ¿cómo vas a estimar y valorar a “alguien” que con frecuencia te está incitando a que te inyectes anabolizantes y pongas en riesgo tu salud por el simple hecho de que ganes una medalla o un diploma? Lo único que a estos subnormales les interesa es “aparentar”, a costa de ti, que son el “mejor entrenador” o el “mejor gimnasio”. Como estos “subnormales” y “anormales” no poseen ni la más mínima estimación a sí mismos, jamás te van a estimar ni valorar; pues nadie da lo que no tiene.

En mi opinión, una de las muchas causas que lleva a los jóvenes –incluso adultos– a usar anabólicos, es que en la sociedad peruana hay dos monstruos gigantescos y poderosos que deberían trabajar a favor de todos los peruanos; sin embargo, vienen trabajando en nuestra contra. Me refiero a los “medios de comunicación masivo” (radio, televisión, internet, periódicos, etc.) y la “educación en general” (tanto primaria como secundaria). De la educación en general, será materia de tratarlo en otro artículo por su amplitud. Por esta circunstancia –aunque los padres de familia puedan estar inculcando a sus hijos buenas enseñanzas y valores–, digo: “El niño o el joven enciende la televisión y ve tantísimas cosas improductivas y hasta negativas”. La televisión, por ejemplo, le hace creer que “todo en la vida es rápido y fácil”, o que “como todo el mundo lo hace, es normal”, o que “mientras uses o tengas tal o cual cosa, estás por encima de los demás”, etc., etc. Igual sucede cuando va a internet, sale a la calle o ve los periódicos o las películas. Literalmente es bombardeado por una infinidad de información totalmente tendenciosa y negativa. Entonces, reconozco que –además de la enorme labor de los padres de familia– es un desafío titánico esto de persuadir a la gente en general a que decidan objetivamente en sus vidas sin influencia de nada, menos de los “subnormales” que pululan en muchísimos gimnasios del Perú alardeando de Entrenadores Personales (Personal Trainer, en inglés).  

Aunque les resulte paradójico, la gran mayoría de entrenadores de aeróbicos y anaeróbicos con “grandes títulos deportivos” no tienen la catadura moral, el nivel cultural ni la personalidad suficiente para estar de instructores, o “profesores” como se hacen llamar muchos de ellos. Ya lo dije líneas arriba: «En la inmensa mayoría de casos, mientras mayor sea el “título deportivo” que ostente el individuo, menor nivel cultural y mayor desequilibrio emocional va a tener; todo esto conlleva inexorablemente a una menor dignidad». ¡Compruébalo tú mismo, observándolos!

Si en la década de los 80, yo destaqué en este deporte sin el uso de los anabólicos, fue porque aquí en el Perú los usaban aproximadamente un 50 % de atletas. Hoy en la actualidad (así sea una competencia provincial) es IMPOSIBLE DESTACAR sin los “anabólicos esteroides”. Pues, las estadísticas del Ministerio de Salud del Perú afirman que, en el año 2014, un aproximado del 80 % de la población peruana tiene problemas psicológicos o emocionales. Por tal motivo, la ciencia asegura que NINGUNA PERSONA, EN SU SANO JUICIO, va a exponer su salud ni su vida por mendigar una migaja de admiración o reconocimiento. Tampoco me burlo de esa pobre gente, ya que cada quien ve como sobresalir en la vida. Por ese motivo, opino que el Ministerio de Educación del Perú debería hacer una evaluación cognoscitiva, psicológica y psiquiátrica a “todos los entrenadores de aeróbicos y anaeróbicos”. Estoy seguro que, por lo menos, el 98 % desaprueba.

En cualquier aspecto de la vida, si alguien te dice o te increpa ¡“Hazlo así o hazlo asá”!, obsérvalo con detenimiento y ve si tiene la “autoridad cognoscitiva” y si alguna vez en su vida lo hizo (“autoridad moral”); de no ser así, no pierdas tu tiempo escuchándolo. Eso siempre les recalco a todos mis clientes. Pues la “autoridad moral” y la “autoridad cognoscitiva” (entre otras cualidades) son imprescindibles para merecerse el respeto de nuestros seguidores. Y para terminar, te recuerdo otra vez que lo más importante que tenemos, después de la vida, es la salud. Igualmente, mis clientes saben que jamás les hablo de dietas, sino de comer correctamente. Practica deporte, estudia si estás joven o trabaja con esmero si estás adulto.

P.D. Cualquier pregunta que tengas, utiliza mi correo electrónico. Si deseas explicaciones muy detalladas, obviamente, emplea mi teléfono para concertar una cita.